La salmonelosis es una infección bacteriana causada por la Salmonella que afecta al aparato digestivo. Es una de las principales causas de zoonosis (enfermedad transmitida de un animal a un humano) en el mundo y tiene su origen al consumir alimentos contaminados.
En el año 2021 se notificaron más de 60.000 casos de salmonelosis en la Unión Europea, de los que casi un 20% requirieron hospitalización. España se situó como el cuarto país de la UE con más casos de salmonelosis comunicados, pero cabe destacar que no hay una vigilancia y normas homogéneas para notificar los casos de salmonelosis dentro de la UE.
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¿Cuál es el origen de la salmonelosis?
La salmonelosis generalmente se contrae al ingerir huevos crudos o productos cárnicos contaminados con la bacteria Salmonella. También puede transmitirse a través de leche no pasteurizada, productos de panadería y pastelería y vegetales o zumos contaminados, aunque en menor porcentaje.
El riesgo de contraer salmonelosis es más alto en países con agua no potable o sistemas de cloacas inadecuados.
Nuestros expertos médicos te dejan algunas recomendaciones importantes para prevenir la infección:
¿Cómo prevenir la salmonelosis?
1. Higiene alimentaria:
Lávate las manos con agua y jabón antes de manipular alimentos y después de tocar carne cruda o huevos.
2. Cocina adecuadamente:
Asegúrate de cocinar los alimentos a temperaturas seguras para matar las bacterias. Por ejemplo, los huevos deben cocinarse completamente y la carne blanca debe estar muy bien cocida.
3. Evita la contaminación cruzada:
No mezcles utensilios o tablas de cortar utilizados para alimentos crudos con los que se usan para alimentos cocidos.
4. Manejo seguro de alimentos:
Refrigera correctamente los alimentos a temperaturas seguras (por debajo de 4°C) y empaqueta correctamente la carne cruda dentro de la nevera para que no entre en contacto directo con otros alimentos. Asimismo, evita comer alimentos caducados o en mal estado. Lava bien las frutas y verduras antes de consumirlas.
5. Bebe agua segura:
Asegúrate de que el agua que bebes sea potable y esté libre de contaminantes.
6. Atención a los grupos de riesgo:
Las personas con sistemas inmunológicos debilitados, como los ancianos, los niños pequeños y las mujeres embarazadas, deben ser especialmente cautelosas.
¿La salmonelosis es contagiosa?
No. La salmonelosis no se contagia directamente de persona a persona. La principal vía de transmisión es a través de alimentos o agua contaminados con la bacteria Salmonella.
Sin embargo, en casos excepcionales, sí que puede haber transmisión indirecta de persona a persona. Por ejemplo, a través del contacto directo con las heces de un animal o persona infectada.
En general, la salmonelosis se propaga principalmente a través de alimentos contaminados, por lo que es fundamental seguir prácticas de higiene alimentaria y evitar el consumo de alimentos crudos o mal cocidos.
¿Qué síntomas causa la salmonelosis?
Los síntomas de la infección por salmonela aparecen entre 6 a 72 horas tras el consumo de los alimentos contaminados, y si bien hay personas que pueden recuperarse sin tratamiento o con antibióticos, la salmonelosis puede causar un cuadro grave en personas con casos de deshidratación, inmunodeprimidas o con enfermedades asociadas.
Los síntomas más comunes de la salmonelosis incluyen:
- Diarrea
- Cólicos estomacales (abdominales)
- Fiebre
- Náuseas
- Vómitos
- Escalofríos
- Dolor de cabeza
- Sangre en las heces
Estos síntomas suelen durar de unos pocos días a una semana. La diarrea puede persistir hasta 10 días, pero en algunos casos, los intestinos pueden tardar varios meses en volver a la deposición habitual.
La salmonelosis se diagnostica principalmente mediante los signos y síntomas que presenta el paciente. Sin embargo, también se pueden realizar pruebas específicas para confirmar la infección.
- Análisis de heces: se examina una muestra de heces del paciente para detectar la presencia de la bacteria Salmonella. Aunque la mayoría de las personas se recuperan antes de obtener los resultados, esta prueba es útil para confirmar la infección.
- Análisis de sangre: en casos graves o cuando se sospecha que la infección ha llegado al torrente sanguíneo, se puede realizar un análisis de sangre para verificar la presencia de la bacteria.
¿Cómo curar la salmonelosis?
En la mayoría de los casos, la salmonelosis no requiere un tratamiento específico y las personas se recuperan sin medicación. Sin embargo, si los síntomas persisten o hay riesgo de complicaciones, se pueden seguir estas recomendaciones:
- Hidratación: beber líquidos para prevenir la deshidratación.
- Alimentación: consumir alimentos suaves y fáciles de digerir.
- Descanso: descansar y evitar alimentos irritantes.
- Atención médica: consultar al médico si los síntomas no mejoran o si hay signos de deshidratación o complicaciones.
- Antibióticos: en casos graves, se pueden recetar antibióticos como ciprofloxacino, azitromicina o ceftriaxona durante varios días. A los niños se les administra trimetoprima-sulfametoxazol.
Recuerda que siempre es importante buscar atención médica si los síntomas de la salmonelosis son graves o persisten, especialmente en grupos de riesgo como bebés, niños pequeños, adultos mayores o personas con sistemas inmunológicos debilitados.